En el día de la fotografía
Por: Raysa White
Ayer en el Día de la Fotografía, envié una salutación a un grupo de amigos fotógrafos con la sensación de que decenas de fotógrafos valiosos se me quedaban fuera, y esa sensación la tuve hasta la noche en que entro en mi mente la imagen de un fotógrafo joven, inteligente, generoso que conocí en mis primeros años de desaciertos con la fotografía. Aunque habíamos sido muy amigos, el tiempo me hizo olvidar su nombre. Y entrando en el perfil de mi colega, el destacado narrador y novelista avileño, Rodolfo Torres me encuentro esta foto.
Tomas Barceló es el de la izquierda, Rodolfo al extremo derecho, a su lado su prima Zenia Sánchez.
No sabía que Tomas había muerto, me lo hacía, como yo, ya viejito con nietos. Pero la muerte que es, a veces, imprudente, se le aprecio en Argentina, hace unos cinco años. Se cuenta y no se cree. El entro a un hospital con su dolencia asmática y le pusieron una inyección que le provocó un infarto. No lo pudo superar.
Hoy, con dolor enorme, hago un pequeño flash y le devuelvo aquel retrato hecho por otro grande de la cámara, Julio Rodríguez, en pose de relajada cavilación. Adios, querido amigo, nos veremos, como decían aquellos simpaticos ositos yoguis, en la próxima fotografía. (RW)